Recibe Las Ultimas Actualizaciones

miércoles, 29 de septiembre de 2010

"Deja vu"

"Deja vu"

   10 de Noviembre de 1939,20:00 de la tarde,noche fria y humeda,colina de Ettersberg,Campo de concentración de Buchenwald.Comienzan a sonar las sirenas por todo el complejo,se agolpan miles de judios en todo el centro,a sabiendas lo que se avecina de ahí a unos minutos.
 
     El comandante alza la voz,comienza a nombrar a algunos reclusos,repentinamente se escucha el nombre: "ADAEL STINKER",nada más oir su nombre,el preso judio da un paso hacia el frente,y como todos los días del año desde que arribó a Buchenwald hace un año,allá por 1938 tras la famosa noche de los cristales rotos,sabía a lo que se atenía
ya.Le esperaba la crueldad tras esos muros y esa puerta,aquella que nada más traspasarla era como percibir el mismo infierno.

      Nuevamente volvía a ser testigo de aquellos experimentos,de los cuales ni siquiera muchos de los nazis sospechaban de su existencia.Esta vez se vio boca arriba,atado de pies y manos,a su alrededor toda la sala cubierta de espejos y una gran mesa a sus pies con todo tipo de utensilios e instrumentos capaces de hacer temblar  incluso a un exánime.El doctor con su uniforme(impoluto en un principio) tiznado y salpicado de sangre,comienza la acción.Adael ve como sin anestesia va seccionando la piel de sus brazos(de donde tenía heridasa de guerra)para después acabar por sus muslos,sus gritos son tan graves y grotescos que hace que nada más se oiga alrededor,para después esas porciones de piel coserlas a otro preso judio,mientras que las de ese mismo preso,las acerca en una mesilla para coserselas en el lugar de donde le extrajo su propia piel,para colocarsele la piel del otro semejante como si de un tatuaje se tratara.

   Ya exhausto,pierde el conocimiento,hasta que una vez recuperado observa atentamente que todo se ha acabado,se encuentra solo,ni una sola voz,nada...Se ve sin atar a la camilla,se apresura a levantarse,hasta que consigue salir de la nave,pero atiende asustado y extrañado que todo está vacio,quizás hayan llegado las tropas americanas o rusas para liberarlos,cavila Adael.Asi pasa las horas de un lado a otro,solitario,pero sin encontrar salida alguna,pero...inesperadamente todo vuelve a oscurecerse y junto a la noche reaparecen ante si todos los presos y el mismo comandante de siempre.


    Esta vez accede a la sala de experimentos posterior a su llamada por el comandante.Nuevamente se ve envuelto en otro experimento más,atado como el último día,como siempre,a la camilla.Sin anestesia ninguna comienza el hombre de blanco(para Adael el demonio vestido de puro)a rebanarle los ojos,primero uno,seguidamente el otro,inclusive las uñas de sus manos le son arrancadas de cuajo,expulsando sangre a borbotones salpicando su propio cuerpo.Para ya acabar su obra maestra implantandole ojos de felino,más bien se diría que de gato,y donde se ubicaban sus uñas,ser reemplazadas por garras,como si de un hombre-gato se tratase,y cada nuevo experimento los gritos y lamentos son mayores en Adael.


     Y de nuevo,de forma insólita,vuelve a desvelarse observando por segunda vez que todo está en calma,como si todo aquello no hubiese sucedido,afuera sobre todo el campo de concentración,ni un alma,ninguna forma de vida humana y no humana,asi 9 horas,incluso 10 hasta que se suceden los acontecimientos de nuevo,volviendose a su alrededor los presos,el comandante,la sala de experimentos,agonizando...y asi durante varios días más.

     Ya como consecuencia de la locura y el dolor de Adael,cree volverse loco de todo lo que está aconteciendo,hasta que por fín una mañana vislumbra a lo lejos como un grupo de personas,20 aproximadamente,se acercan hacía donde se encuentra él,se dirige hacia ellos,estremecido ante el hecho de ver que no se trata de soldados nazis.Pero algo extraño ocurre,nadie le intuye,ni le siente que está ahí,cree que es una broma o quizás que sean soldados venidos a rescatar a todos los rehenes y por ello tengan como prioridad los almacenes y las naves en donde se situaban estos presos.Pero nada más lejos de eso,observa de nuevo como si ese grupo de personas parecen estar guiados por alguien,asi que se acerca a escuchar...: "Nos encontramos en uno de los que fue campo de concentración en la segunda guerra mundial,aquí entraron 10.000 judios de los cuales fallecieron a causa de trabajos forzosos,maltratos y experimentos unos 7.000,incluso hoy en día se comenta y se dice que al caer la noche pueden escucharse aún los lamentos de aquellos presos judios que soportaron tantas vejaciones y dolor..."

   Suena la verja que da la abertura al campo de concentración,cerrandose para el público en general,y nuevamente vuelve a caer la noche,y Adael ha comprendido que ya jamás escapará de allí...

0 comentarios: